
¿POR QUÉ LAS HOJAS CAMBIAN DE COLOR EN OTOÑO?
¿Os apetece una nueva invitación para este otoño que os ayude a mantener viva la curiosidad de vuestros niños y vuestras niñas, a apreciar el entorno que nos rodea y sus cambios, a fijarse en los detalles…?
Hace unos días hablábamos del experimento con lombarda y hoy quería proponeros que exploréis el color de las hojas y habléis de por qué las hojas de algunos árboles cambian de color en otoño.
Estamos acostumbrados a observar cómo se caen las hojas de los árboles caducos en esta estación del año pero quizás no nos paramos tanto a apreciar cómo esas hojas van cambiando poco a poco de color con el paso de las semanas. Cogemos las hojas del suelo y hacemos manualidades con ellas pero ¿alguna vez nos preguntamos por qué están cambiando de color? Esa es la idea que persigue este experimento y ésta es la invitación (un poco guiada para mi gusto) que preparé con ella. Espero que os guste.
Para empezar quiero explicaros que este experimento (como la mayoría de ellos) consiste en seguir una secuencia de pasos para separar los colores de las hojas (técnica de cromatografía) pero ése no era mi objetivo principal.
No me parece interesante que los niños y las niñas sigan unos pasos guiados para llegar a un resultado, escuchar la explicación del adulto y limpiar la mesa.
Lo que realmente me parece interesante es usar el experimento como un instrumento para encontrar el asombro y a partir de ahí generar preguntas, alentar su curiosidad y buscar respuestas. En mi caso la mayor tiene 8 años y creía que podía ser capaz de extraer algunas conclusiones. El peque de 3 años básicamente confirma lo que dice su hermana 😉
Así que para resumirlo mucho, la separación de los colores de las hojas fue el medio que utilicé pero no el fin.
Inicialmente probamos una versión que hay del experimento con sal pero después de 2 intentos sin lograr separar los colores claudiqué y probamos esta versión con alcohol.
Veréis que la mayoría de los ingredientes son muy fáciles de conseguir:
- Hojas de árbol de varios colores.
- Tarros de cristal.
- Utensilios para cortar y machacar las hojas (cuchillo, tijeras, mortero…).
- Tiras de papel de cocina (o de filtros de café o de folios…).
- Palillos, lápices o depresores.
- Alcohol.
- Gafas de plástico, para proteger los ojos de los peques si van a manipular el alcohol.Unas gafas de piscina también valdrían.
Antes de meternos en cocina empezamos observando los árboles que tenemos delante de casa y los colores de las hojas. Hablamos sobre si en el mismo árbol había hojas de varios colores, de qué color eran las hojas que estaban en las ramas inferiores, en las ramas superiores, de qué color eran las hojas de un árbol, de otro, si recordábamos los colores de esas hojas hace semanas cuando era verano…. y si se les ocurría por qué el color de algunas hojas estaba cambiando ahora en otoño. Sus respuesta fueron del tipo «-Por el calor», «-Por el frío», «-Porque ya toca» Y no les faltaba razón :-)))
Ésta es una foto que tomé aquel día:
Después les invité a recoger hojas de varios colores (verdes, amarillas y rojizas) y nos las llevamos a casa.
Y éstos son los pasos que seguimos en el experimento:
- Trituramos las hojas de un mismo color y metimos los trozos en un tarro con un poco de alcohol. Hicimos lo mismo con las hojas de todos los colores, dejando un tarro con los trozos de hojas verdes, otro con trozos de hojas amarillas y otro con trozos de hojas rojas. Hubiera sido ideal tener un mortero para triturar las hojas.
- Machacamos las hojas dentro del alcohol con una cuchara de madera y tapamos los tarros, para evitar que se evaporase el alcohol. Dejamos reposar varias horas. Durante ese tiempo fuimos viendo cómo el color del alcohol iba cambiando de color poco a poco, especialmente el de las hojas verdes.
- Retiramos las hojas de los vasos dejando el alcohol coloreado.
- Atravesamos la parte superior de cada tira de papel con un palito. Nosotros usamos palillos chinos pero podéis usar un lápiz, unos depresores, etc.
- Apoyamos cada palillo en un vaso y lo dejamos toda la noche.
Al día siguiente nos encontramos las tiras de papel así:
Las caras de los peques era justamente la que yo buscaba y ahí empezaron las preguntas; «-¿Qué ha pasado?», «-¿De dónde han salido los colores?», «-¿El líquido era de un color, por qué las tiras tienen varios colores?», «-¿Ha pasado en todas las tiras de papel?», «-¿Por qué en algunas tiras han salido unos colores y en otras otros?», «-¿En qué orden han aparecido los colores en las tiras de papel?», «-¿Cambian de una tira a otra?», «-¿Dónde estaban escondidos todos esos colores?», etc.
Si queréis que encuentren una explicación solos podéis tratar el tema a lo largo de varios días e ir viendo cómo van llegando a determinadas conclusiones y descartando hipótesis por sí mismos. Todo dependerá de las edades e intereses del grupo. Seguramente con niños y niñas de Primaria sea más sencillo este enfoque.
Con los más peques quizás os apetezca simplemente quedaros con la experimentación del color y su separación en las tiras de papel.
En cualquier caso, podéis aprovechar la actividad para hablar de otras cuestiones, no sólo científicas. Porque las cosas no son siempre lo que parecen, ni son siempre iguales ¿verdad? A veces lo que nos rodea esconde sorpresas y hay que saber esperar a que aparezcan, o provocar que aparezcan. A veces tenemos una opinión sobre algo o alguien y si se dan las condiciones adecuadas podremos apreciar otros matices que a simple vista no vemos. La naturaleza cambia continuamente y si prestamos un poco de atención podremos apreciar su belleza, el paso de las estaciones, el cambio de clima, su efecto en los árboles, las flores, los animales…. Tenemos que levantar la mirada del suelo y observar más la naturaleza que nos rodea, observar las ramas más altas, no sólo las de abajo….
Por último, si os apetece una explicación científica que os ayude a componer algún tipo de respuesta adecuada a la edad de vuestros y vuestras peques podéis consultar este enlace:
https://www.floresyplantas.net/por-que-las-hojas-cambian-de-color-en-otono/
¿Os animáis a buscar los colores escondidos de las hojas y a explorar su color? Seguro que a los peques les encanta y no vuelven a mirar los árboles de la misma manera.
ELENA.
Pingback:Cómo usar el retroproyector con los niños – Infosal
Posted at 08:00h, 24 junio[…] de los anteriores experimentos que tanto os gustaron sobre por qué las hojas cambian de color en otoño y los colores de la lombarda, hoy traigo una nueva idea en forma de invitación para continuar […]
Cecilia Yeny De La Cruz Baldoceda
Posted at 12:19h, 28 diciembreRealuce uno » las hojas también pintan», pero esta variante es formidable,por supuesto que lo incluiré.
Inspirados
Posted at 08:40h, 20 diciembreEstupendo, Cecilia. Gracias por comentar.
Pingback:¿PUEDES CERRAR UNA PIÑA ABIERTA? | Inspirados en Reggio Emilia
Posted at 05:26h, 27 noviembre[…] de los anteriores experimentos que tanto os gustaron sobre por qué las hojas cambian de color en otoño y los colores de la lombarda, hoy traigo una nueva idea en forma de invitación para continuar […]
Carol
Posted at 21:43h, 23 noviembre¡Gracias por la idea! Me parece genial utilizar el entorno para experimentos. Tomo nota
Inspirados
Posted at 08:41h, 20 diciembreSi ¿verdad? Tenemos todo ahí fuera esperando para experimentar…